sábado, 15 de noviembre de 2014

ZINC en Fibrosis Quística (2ª parte)

Obtener suficiente zinc cada día es muy importante, ya que está involucrado en más de 300 funciones del cuerpo como promover el crecimiento, mantener el gusto y el apetito, combatir las infecciones, cicatrizar heridas, y promover el desarrollo sexual. El zinc también ayuda a la liberación hepática de vitamina A en la sangre.

No existen recomendaciones específicas de ingesta diaria de zinc para las personas con FQ aunque se sabe que sus necesidades son mayores que las personas que no tienen FQ (Tabla 1). Si se sospecha que hay un déficit de zinc, considerar la suplementación con 5-10 mg/día niños y 15 mg/día adultos durante 6 meses.

Tabla 1.Recomendaciones de ingesta diaria de zinc (mg) en personas que No tienen FQ

Edad                             Zinc( mg)
0-12 meses
3
1-3 años
3
4-8 años
5
> 9 años
8-13


Para mantener o mejorar la ingesta de zinc debemos incluir alimentos ricos que contengan este mineral y tomar el suplemento multivitamínico, tal y cómo nos lo ha prescrito nuestro médico y/o dietista de la Unidad de FQ. Si nos lo han indicado, también debemos tomar el suplemento de zinc en la dosis y forma prescrita. Los suplementos multivitamínicos diseñados para personas con FQ contienen zinc, pero el resto no todos lo tienen, por ello es importante leer bien la etiqueta y asegurarnos que contiene zinc. Podéis preguntar al equipo de la Unidad de FQ si vuestro multivitamínico tiene suficiente zinc.


Las fuentes alimentarias de zinc son los alimentos ricos en proteínas como las carnes rojas y blancas, lácteos y las ostras. También está presente en alimentos de origen vegetal como el germen de trigo, la levadura de cerveza, los frutos secos (almendras, nueces, avellanas, castañas etc.), las semillas (de calabaza), legumbres (los productos de la soja) y cereales integrales. Algunos cereales de desayuno están fortificados con zinc.

Como comentamos en la entrada anterior, los fitatos presentes principalmente en cereales integrales, legumbres, interfieren con la absorción del zinc pero también algunos alimentos con alto contenido de fitatos (alimentos integrales, legumbres) tienen un mayor contenido en zinc y por tanto se contrarresta su efecto. Por ejemplo, los granos enteros contienen más zinc que los refinados. La cocción del alimento también reduce su contenido en fitatos. 

Las técnicas de preparación de los alimentos, como remojar y germinar las legumbres, cereales y semillas, así como la fermentación del pan, pueden reducir la unión del zinc con el ácido fítico y aumentar la biodisponibilidad del zinc.


Bibliografía
  • Borowitz D, Baker RD, Stallings V. Consensus report on nutrition for pediatric patients with cystic fibrosis. J Ped Gastro Nutr 2002; 35:246-259.
  • Sinaasappel M y cols. Nutrition in patients with CF: a European Consensus. J Cyst Fibros 2002
  • Krebs NF, Sontag M, Accurso FJ y cols. Low plasma zinc concentrations in young infants with cystic fibrosis. J of  Peds. 1998. 133(6):761-4.
  • Palin D, Underwood BA, Denning CF. Effect of oral zinc supplementation on plasma levels of vitamin A and retinol binding protein in cystic fibrosis. Am J Clin Nutr. 1979;32:1253-1259.
  • Krebs NF, Westcott JE, Arnold TD y cols. Abnormalities in zinc homeostasis in young infants with cystic fibrosis. Ped Res.2000. 48(2): 256-61.

sábado, 8 de noviembre de 2014

ZINC en Fibrosis Quística






El zinc es un mineral que tiene muchas funciones en nuestro organismo como regular el apetito, el crecimiento y la inmunidad. Estas funciones, junto a que su absorción puede estar inhibida por la presencia de grasa y proteína no digerida en el intestino, hacen que sea un mineral de gran interés para las personas con FQ.

El zinc es un nutriente esencial porque nuestro organismo no es capaz de sintetizarlo y debe ser aportado por la dieta o los suplementos multivitamínicos. Su nivel en sangre se mantiene a través de la absorción intestinal tanto del zinc aportado por los alimentos y los suplementos (aporte externo) como del zinc “reciclado", el que se excreta del páncreas en el intestino).para que pueda ser reabsorbido (aporte interno).

La malabsorción de grasa puede interferir con la conservación normal del zinc y mejora con el tratamiento de reemplazo de enzimas pancreáticas. Su absorción también puede estar inhibida por la presencia en grandes cantidades de:
- fitatos, son sustancias químicas naturales presentes principalmente en cereales, legumbres, frutos secos y semillas. Los fitatos son antinutrientes, en tanto en cuanto tienen la capacidad de unirse a nutrientes e impedir su absorción.
- fibra dietética

- otros minerales, como el calcio y hierro, se recomienda tomar estos suplementos separados del suplemento de zinc.

El déficit de zinc se presenta ya en muchos casos desde el diagnóstico por cribado neonatal, por ello es importante hacer un diagnóstico temprano, identificar el estado del páncreas e iniciar cuanto antes la suplementación con enzimas pancreáticas, macro y micro nutrientes, incluyendo el zinc para promover un estado nutricional óptimo. Una ingesta adecuada de zinc es vital sobre todo en periodos de rápido crecimiento.

El zinc está relacionado con la vitamina A o retinol, su presencia es necesaria para la síntesis de la proteína que transporta el retinol en el hígado y lo libera a la sangre. Se debe considerar la suplementación con zinc cuando los niveles de vitamina A están bajos y no responden a la suplementación con vitamina A.

Un uso adecuado de las enzimas pancreáticas y tomar un suplemento multivitamínico que contenga zinc suele ser suficiente para mantener un estado normal de este mineral. La deficiencia de zinc es difícil de caracterizar en FQ porque puede estar presente cuando el zinc se encuentra en sangre en niveles normales. Los niveles bajos en plasma sólo identifican aquellas personas con deficiencia de moderada a severa. La sospecha de un déficit de zinc se puede presentar cuando hay cambios en el apetito y el crecimiento y más sutilmente cuando disminuye la inmunidad. Al igual que con otros nutrientes, las personas con FQ deben ser evaluadas individualmente. 

Bibliografía
  • Borowitz D, Baker RD, Stallings V. Consensus report on nutrition for pediatric patients with cystic fibrosis. J Ped Gastro Nutr 2002; 35:246-259.
  • Sinaasappel M y cols. Nutrition in patients with CF: a European Consensus. J Cyst Fibros 2002
  • Krebs NF, Sontag M, Accurso FJ y cols. Low plasma zinc concentrations in young infants with cystic fibrosis. J of  Peds. 1998. 133(6):761-4.
  • Palin D, Underwood BA, Denning CF. Effect of oral zinc supplementation on plasma levels of vitamin A and retinol binding protein in cystic fibrosis. Am J Clin Nutr. 1979;32:1253-1259.
  • Krebs NF, Westcott JE, Arnold TD y cols. Abnormalities in zinc homeostasis in young infants with cystic fibrosis. Ped Res.2000. 48(2): 256-61.